NieR: Automata presenta elementos implacables parecidos a pícaros; la muerte conlleva consecuencias importantes. Perder la vida puede significar perder permanentemente objetos valiosos y mejoras, lo que tiene un impacto especial al final del juego. Sin embargo, existe la posibilidad de recuperar sus pérdidas antes de que desaparezcan para siempre. Esta guía explica qué sucede tras la muerte y cómo recuperar su cuerpo para minimizar el impacto.
Morir en NieR: Automata resulta en la pérdida de todos los XP obtenidos desde tu última partida guardada y, lo que es más importante, de todos los chips enchufables equipados actualmente. Si bien los chips enchufables son reemplazables, algunos son raros y requieren una inversión significativa. La reaparición deja vacías las ranuras de fichas equipadas, por lo que es necesario volver a equiparlas o seleccionar un ajuste preestablecido.
Lo más importante es que los chips enchufables perdidos no se pierden inmediatamente para siempre. Tienes una oportunidad de recuperarlos. No recuperar tu cuerpo antes de morir nuevamente significa la pérdida permanente de esos chips.
Después de la muerte, tu prioridad es recuperar tu cuerpo. Aparece un ícono de cuerpo azul en el mapa, que lo guía a su ubicación. Interactuar con tu cuerpo restaura tus Plug-In Chips, presentando dos opciones:
Reparación: Tu XP permanece perdida, pero tu antiguo cuerpo se convierte en un compañero de IA hasta que es destruido.
Recuperar: Recuperas la XP perdida desde tu último guardado.
Independientemente de tu elección, puedes volver a equipar tus chips enchufables recuperados, anulando tu configuración actual o simplemente volver a agregarlos a tu inventario.